Canciller de Ecuador en DN!


  Ricardo Patiño, ministro de relaciones exteriores y movilidad humana del Ecuador, fue entrevistado por los conductores del programa periodístico Democracy Now! Aquí está el video y más abajo la transcripción en castellano que hice en una colaboración para la emisora. Patiño responde sobre varios temas. El decreto de Estados Unidos que amenaza la soberanía de Venezuela. El caso de Julian Assange, de WikiLeaks, con asilo político en la embajada ecuatoriana en Londres. La empresa petrolera Texaco Chevron, dueña de una contaminación ambiental colosal, que pretende quitarle más riqueza al país sudamericano. La libertad de expresión y los medios de comunicación como un servicio público.


Unasur Mitad del Mundo

  La Unión de Estados Suramericanos puede funcionar. Y funciona. Los cancilleres de los doce países se reunieron ayer en Ecuador. La nueva sede del organismo se encuentra en la Mitad del Mundo. Desde allí firmaron dos notificaciones. La primera es una respuesta a la orden ejecutiva de Barack Obama al declarar como inusual y extraordinaria amenaza, para los Estados Unidos, la situación en Venezuela. Unasur pidió entonces la derogación de ese decreto ejecutivo al entender que es una acción injerencista a la soberanía y al principio de no intervención en los asuntos internos de otros Estados. La segunda es sobre la renovación del tutelaje al diálogo político dentro de Venezuela. Misión que desde el año pasado encabezan los cancilleres de Brasil, Colombia y Ecuador. Si bien la asamblea del organismo suramericano fue un éxito, los medios periodísticos, los alineados en el relato único occidental, casi no la reflejan. Tendrá que seguir igual. Es una unión importante.

        

La segunda imagen invertida


  Lo más importante en los atentados a la Embajada de Israel y la sede de la DAIA es lo internacional. Lo exterior trata de imponerse a lo doméstico. Aunque esa presión no sea determinante sí es mayúscula. La Argentina sigue concentrada, dentro del marco de la opinión pública, en su propio ombligo. Es cierto. Pero esta vez trascendió. En parte gracias a la insistencia presidencial. Otro poco debido a la obviedad. Una gran responsabilidad de esa ignorancia se mantiene del lado de los medios periodísticos. ¿Es que nadie une las cosas?, dijo Cristina Kirchner, actual presidenta argentina, mientras juntaba sus manos al frente en su discurso del primero de marzo en el Congreso. También publicó un artículo al respecto. Esta semana eso que ya se sabía quedó demostrado de manera más clara con otro discurso, el de Benjamin Netanyahu, actual primer ministro de Israel, en el Congreso de los Estados Unidos. Una presentación que no fue respaldada por Barack Obama y la mayoría del Partido Demócrata. De hecho las conversaciones con Irán encabezadas por el secretario de estado estadounidense, y con el apoyo de la Unión Europea, tuvieron avances en estos mismos días. El actual gobierno norteamericano favorece un acuerdo nuclear con Irán para evitar confrontaciones bélicas. La denuncia del fallecido fiscal Alberto Nisman debe leerse dentro de estas claves. Una denuncia sin pruebas y con contradicciones que fue desestimada de manera profesional por el juez Daniel Rafecas. Si bien para las instituciones argentinas habría sido mejor que el Memorándum con Irán se debatiera con más profundidad y consenso entre los partidos políticos -y habría traído menos problemas- no existe ninguna sola prueba, hasta ahora, que lo demuestre como un intento de encubrir. Además no se concretó.